En el mundo Scout no faltan las risas y las ocurrencias inesperadas de cada uno de los integrantes del grupo. Cada actividad, cada campamento o reunión es una oportunidad para aprender, no solo sobre escultismo y valores, sino también sobre la inocencia y la creatividad de los niños que siempre encuentran la forma de sorprendernos.

Por eso, en esta sección te mostramos algunas de las anécdotas más graciosas y entrañables escritas por ellos mismos. ¡Prepárate para reír e incluso recordar esos momentos que hacen del escultismo una experiencia única!

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Vamos a situarnos. El killer es un juego en el que tratas de “matar” a otro jugador. Hay dos vasos, uno con los nombres de todas las personas del grupo y otro con el mismo número de papeles con objetos. El objetivo es aguantar hasta el final, “matando” al dar a la persona de tu papel el objeto señalado. Y se hace durante varios días seguidos. Pues bien, en el campamento de verano de 2023 jugamos.

Era mi primer año en el grupo y me parecía un juego un poco raro. Pero descubrí que se me daba muy bien. Maté a gente con una piqueta, un hilo, un peine, una bolsa de poto, plato y cubiertos e incluso intenté matar a alguien con una piedra. Yo me cuidaba mucho de no coger nada que me ofrecieran y aguanté hasta casi el penúltimo día.

Estaba confiada y esperaba aguantar hasta el final. Precisamente en eso pensaba cuando me dirigí a servicios y nos tocaba menaje, es decir, limpiar las cazuelas, cazos…etc. Entonces una persona de mi mismo equipo me dijo que llevara un unas cazuelas y un cucharón sucio a los que estaban fuera fregando. Yo asentí, cogí los utensilios de cocina y me dirigí a la puerta. Pero entonces, oí una voz que me dejó helada al decir: “Estás muerta”. Me giré y le dije: “¡¿QUÉÉÉÉ?!” y me contestó “Pues eso. Me tocaba matarte con ese cucharón y tú lo has cogido”. No tuve más remedio que darle la razón. Lo peor fue que al matarme a mi se llevó la victoria y ganó el juego. Nunca pensaría que moriría a manos de un cucharón

Escrito por miembro de la patrulla Murciélagos, Noviembre del 2024

Corría el año 2024 y la tropa junto a la manada acababan de llegar al albergue donde pasarían sus próximos días.
La patrulla todopoderosa de Murciélagos se estaba estableciendo en su dormitorio cuando una persona encontró en una tenue esquina una pequeña almendra seca. Este lo cogió y se lo enseño a sus compañeros felizmente. Uno de estos entre risas le nombró como HUNSON. Este fue el comienzo de algo mayor de lo que esperábamos. Acudimos a un rotulador azul aqua para hacerle dos simples ojos y una sonriente boca.
Un rato después la patrulla panteras entró en nuestra morada encontrándose allí a nosotros y a HUNSON, nosotros se le presentamos y juntos nos arrodillamos frente a nuestra almendra. Este
empezaba a coger fama y poder entre nosotros además de que se iba uniendo más gente a nuestros
halagos hacia él.
Decidimos salir fuera ya y en una discreta esquina recolectábamos hojas, piedras y otras almendras solo para HUNSON hasta construirle su propio altar.
Allí nos asignamos unos cargos para poder bendecir, proteger e incluso dar nuestra vida si HUNSON lo requería. Incluso firmamos un tratado de total lealtad hacia él. Así creamos la religión de HUNSON.
Estuvimos rezando y cantándole durante minutos o incluso horas.
Cuando menos nos lo esperábamos un pequeño niño apareció y salió corriendo con nuestro dios y decidió arrojarlo a algún lugar inalcanzable del que nada pudimos hacer. Tuvimos la idea de coger otra almendra y apodarla como HUNSON II y poniéndole la cara de su ascendiente. Le hicimos una ceremonia para transmitirle el alma de HUNSON y así recuperarle.
Después de estos sucesos muchos cánticos y rezos, HUNSON volvió a ser raptado y todos sus seguidores le dedicamos un castigo por su recuperación. Tras
volverlo a tener este estaba cambiado con distintos colores en vez de su marrón russet, pero eso no
importaba.
Actualmente no se sabe su paradero ni su portador exactos pero lo que sí sabemos es que nunca se ira de nuestros corazones…

Escrito por un integrante de la patrulla Murciélagos, Diciembre del 2024.